Alito Moreno desata polémica tras lanzar críticas a Pemex
Alejandro “Alito” Moreno volvió a estar en el centro del debate público luego de publicar una columna en El Universal donde arremetió contra la gestión de Petróleos Mexicanos (Pemex) bajo el gobierno de Morena. En el texto, el dirigente nacional del PRI acusó que la empresa estatal está en ruinas por culpa de la llamada Cuarta Transformación.
Desde su cuenta de X, Alito compartió el artículo en el que señala que Pemex, lejos de fortalecerse, ha sido víctima de despilfarro, corrupción e ineficiencia. De inmediato, las redes sociales estallaron y muchos usuarios le recordaron el papel que jugó su partido en el deterioro de la petrolera.
“Pemex está en quiebra”: acusa Alito en su columna
Una visión crítica del modelo energético de la 4T
En su publicación, Moreno afirmó que Pemex atraviesa uno de los peores momentos de su historia, convertido en un “barril sin fondo” debido a lo que calificó como un saqueo institucionalizado. También aseguró que las promesas de soberanía energética de Morena solo han resultado en más deudas y pérdidas millonarias año tras año.
“El gobierno ha optado por saquear a Pemex, revivir un modelo obsoleto, sin futuro y profundamente costoso”, escribió el senador priista, concluyendo que, al igual que la empresa, “el país está en quiebra”.
Redes sociales no perdonan y le sacan los trapitos al PRI
Usuarios le recuerdan el pasado del tricolor
La publicación de Alito provocó una avalancha de críticas en redes sociales. Cientos de internautas le recordaron que durante los más de 70 años de gobiernos del PRI, Pemex también sufrió desvíos, corrupción y falta de visión.
Algunos comentarios irónicos señalaban que el priista tiene “memoria selectiva”, mientras otros le exigieron explicar cómo pretende ser una voz legítima cuando su propio partido es corresponsable de los problemas actuales de la empresa petrolera.
Alito Moreno se dice perseguido político
No es la primera vez que el dirigente del PRI lanza fuertes declaraciones contra el gobierno federal. En semanas anteriores, aseguró que es un “perseguido político” desde el sexenio de Andrés Manuel López Obrador y ha mantenido una línea crítica constante hacia la presidenta Claudia Sheinbaum y todo lo relacionado con Morena.
Ahora, con sus ataques a Pemex, reaviva la tensión política y mediática, aunque con un efecto contrario al deseado: más que ganar apoyo, ha desatado indignación.
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