El Gobierno de Claudia Sheinbaum ha anunciado un aumento del 12% al salario mínimo que entrará en vigor a partir del 1 de enero de 2025. Con esta medida, el salario mínimo general pasará de $248.93 a $278.80 por día, mientras que en la Zona Libre de la Frontera Norte (ZLFN) alcanzará los $419.88 diarios, marcando un paso significativo en la recuperación del poder adquisitivo de los trabajadores mexicanos.
Un paso más hacia el bienestar económico
Según Marath Bolaños, titular de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), el objetivo del aumento es que un salario mínimo pueda cubrir el equivalente a 2.5 canastas básicas, mejorando sustancialmente la calidad de vida de las familias. Este ajuste no solo beneficia a los trabajadores con el salario base, sino que tiene el potencial de impactar positivamente la economía al incrementar el consumo interno.
El funcionario destacó que, desde el inicio de la administración de la Cuarta Transformación, el salario mínimo ha tenido una recuperación acumulada del 135%, convirtiéndose en un símbolo de las políticas enfocadas en reducir la brecha de desigualdad económica.
¿Qué significa este aumento para México?
El incremento al salario mínimo ha sido bien recibido por sectores laborales y sociales, quienes consideran que este ajuste es un paso hacia la dignificación del trabajo en el país. Sin embargo, también surgen dudas sobre los efectos inflacionarios que podría generar, un tema que sigue siendo motivo de análisis entre expertos.
El Gobierno asegura que este aumento está diseñado para mejorar el poder adquisitivo sin comprometer la estabilidad económica. Además, refuerza el compromiso con el modelo iniciado en la administración de López Obrador, enfocado en garantizar condiciones más justas para los trabajadores mexicanos.
Con este anuncio, Claudia Sheinbaum reafirma su postura en favor de la justicia social, pero queda en manos de los ciudadanos y economistas evaluar su impacto real en los próximos meses.