Claudia Ruiz Massieu, dirigente nacional del PRI, anunció el pasado lunes recortes masivos de trabajadores del partido con el fin de “racionar recursos” ya que sus prerrogativas fueron disminuidas desde su estrepitosa derrota del pasado 1 de julio.
Desde septiembre circulaba el rumor de que el partido tendría que reducir salarios, hacer despidos masivos, desaparecer apoyos para militantes y simpatizantes y eliminar oficinas. Ahora el anuncio vino de boca de la propia dirigente.
En una conferencia de prensa en el Salón “Presidentes” del Comité Directivo Estatal priista del Estado de México, Ruiz Massieu señaló que su partido está hoy en día “ante una nueva realidad” en la que estarán “obligados a haber un ejercicio de reducción de gastos, de reducción de personal”.
La dirigente expresó que serán despidos masivos pues reconoció que el PRI, como un partido con “una representación muy amplia”, tenía “un aparato burocrático muy grande”.
Se sabe que dicho partido cuenta con varios edificios en cada estado, cada uno con su planta de trabajadores. Un recorte masivo de personal requeriría de abundantes recursos para las liquidaciones.
A pesar de despedir trabajadores, aseguró, el partido seguirá con “el ritmo de actividades que debe tener un partido político” y no verá entorpecidas dichas labores.
Aseguró además que cuidarán “los derechos laborales de quienes laboran” en el PRI.
Se dijo segura de que los militantes priistas no abandonarán el partido, pero si lo hacen “somos un partido que respeta las decisiones personales de su militancia, respecto de su vida profesional”.
Durante este 2018 el PRI recibió mil 800 millones de pesos como parte de sus prerrogativas. En el siguiente año se contempla que reciba mil 100 millones.
Sin embargo, Morena está impulsando una reducción a la mitad de las prerrogativas para el 2019. En caso de que se apruebe, el PRI estaría recibiendo unos 400 millones de pesos.