Felipe Calderón tiene un objetivo: volver a derrotar a Andrés Manuel López Obrador en las urnas. “Haiga sido como haiga sido” en 2006 el expresidente de México ganó la Presidencia al tabasqueño. Ahora viene la revancha.
La tranquila mañana sabatina en la Exhacienda Venta de Guadalupe se rota por el barullo de acomodadores de sillas y mesas. México Libre quiere ser partido político. Pero la convocatoria es flácida. “Está difícil”, admite el expanista en entrevista con LA SILLA ROTA.
Sin embargo, y refiriéndose a su histórico adversario político como “presidente López Obrador”, lo quiere derrotar en las urnas para ser su contrapeso. “Vamos a ser todo lo posible, todo lo éticamente posible, para ganarle la mayoría a Morena, para derrotar a Morena”, advierte.
Ambos se conocen. Ambos son animales políticos. Uno nacido en pañales del PRI, luego migró a la izquierda con el PRD hasta acabar en la cúspide con Morena. Otro nacido en pañales blanquiazules y siempre despreciando al priismo.