El mundo de las redes sociales y los desafíos extremos no deja de sorprendernos. En diciembre pasado, la creadora de contenido de OnlyFans Bonnie Blue afirmó haberse acostado con 1,057 hombres en tan solo 12 horas, rompiendo el récord establecido por Lisa Sparks (919 hombres). Sin embargo, más allá del número impactante, esta hazaña ha despertado fuertes controversias y dudas.
Consecuencias físicas y emocionales del desafío
Aunque Bonnie Blue asegura haber llevado a cabo este reto de forma voluntaria, no se puede ignorar el impacto físico que implica una experiencia así. La lubricación vaginal, esencial para evitar daños durante el sexo, tiende a disminuir bajo estrés o repetición continua, lo que puede provocar desgarros, infecciones urinarias o incluso dolores prolongados, como en el caso de Sparks.
Además, el uso constante de preservativos con tantos participantes aumenta la probabilidad de errores, lo que podría exponerla a infecciones de transmisión sexual (ITS), incluso si los hombres se sometieron a pruebas previas.
En el plano emocional, los desafíos extremos por fama en redes sociales generan preguntas sobre los límites de la libertad personal y los costos mentales que conllevan. ¿Cuánto influye la presión de las redes en este tipo de decisiones?
Polémicas y críticas
A diferencia de Lily Phillips, quien documentó sus 100 encuentros previos, Bonnie Blue solo ha mostrado imágenes de los participantes haciendo fila y un breve video del “después”. La falta de pruebas claras ha llevado a muchos a cuestionar la veracidad del evento.
Bonnie ya había sido señalada anteriormente por organizar eventos sexuales controvertidos, como uno en Australia dirigido a adolescentes mayores de 18 años, lo que le valió la prohibición de entrar al país.
Esta situación no solo plantea debates sobre los límites éticos, sino también sobre los riesgos de buscar fama mediante desafíos extremos en la era digital.