(AFN): El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, tenía la propuesta de cerrar por completo la frontera de Estados Unidos con México, a fin de evitar la migración ilegal hacia el país norteamericano, sin embargo, sus ideas fueron rechazadas por sus asesores.
Aunque las intenciones de Trump no se ejecutan todavía, de haberse implementado aunque fuese un día, las pérdidas económicas para los empresarios habrían sido críticas. La ciudad de Tijuana registraría pérdidas para el sector empresarial que podrían estimarse en 40% de su reducción que afectaría directamente a los habitantes de la localidad, debido a que en solo un día cruzan 3.000 camiones a Estados Unidos que representan 84 millones de dólares en mercancía.
El 70% del comercio de México y Estados Unidos se logra a través del transporte terrestre, además del tráfico diario de personas que se dirigen a sus trabajos y escuelas, tendría repercusiones en la vida diaria de millones de personas que viven en ambos lados de la línea divisoria.
El cierre de tan solo un día entre Tijuana y el condado de San Diego (EE.UU) también representaría reducciones millonarias para los Estados Unidos, porque muchas empresas internacionales están concentradas en el territorio mexicano y exportan al país vecino. Ante ello, el mandatario estadounidense ha reconocido la baja que pudieran significar para su país, pero insiste en medidas de cierre porque da prioridad a la seguridad y el bloqueo del narcotráfico.
En diciembre de 2018 el sector turístico mexicano registró importantes pérdidas considerables, que afectaron a hoteles, salones sociales y eventos, debido a las constantes informaciones difundidas sobre la caravanas de migrantes y cierres de garitas de aquel entonces. Mientras que en lado estadounidense se registraron en pérdidas un total de casi cinco millones de dólares en un día, de acuerdo a cifras emitidas por la Cámara de Comercio local.
La portavoz de SINCABLE, Daniela Castro, indicó que “México es el tercer socio comercial de Estados Unidos, y el año pasado ambos países intercambiaron entre bienes y servicios un valor estimado de 612 millones de dólares que el mismo gobierno de Estados Unidos reconoce, que traducido por día sería un valor promedio de 1.7 millones de dólares”.
Agregó que estos datos económicos son cifras que se convierten en importantes para ambas economías y su cese de flujo sería devastador, por lo tanto, este aspecto se convierte en motivo suficientemente importante como para que el problema fronterizo sea dialogado y resuelto con mayores medidas de seguridad, en vez del cierre.
Después de China, México es el segundo consumidor más importante de los productos estadounidenses que podrían perjudicar su exportación así como su valor, y en EE.UU se verían afectados en los precios de frutas y verduras que podrían subir repentinamente.
Los fabricantes de automóviles también resultarían severamente afectados porque muchas de las piezas se fabrican en México y luego se procesan en EE. UU, de tener que enfrentar un cierre de frontera las líneas de producción quedarían detenidas.