Si al que inventó el PingPong le hubieran dicho que un día unos locos acabarían sustituyendo la pelotita de plástico por un balón y las palas por la propia cabeza del jugador, no se lo hubiera creído. Pero así somos los seres humanos, creativos, y todo deporte que tenga que ver con una pelota se intenta adaptar al futbol.
Yo sinceramente lo veo complicadísimo e ideal para romperte el cuello o la cabeza, pero estas dos personas lo hacen tan fácil…